Yo también quisiera explicar por qué me duelen las personas.
Tengo la sospecha de que a casi todos les duelen los otros, pero además de eso, el mundo los distrae con sus fuegos artificiales. En cambio, hay quienes no tenemos más que el aire viciado de las cuatro paredes y unos cuantos libros que de poco sirven. No hay quien pueda disipar o distraer de las fosforescencias en la carne.
El insomnio sigue ahí.
Ibán escribe y calla el resto del tiempo.
Lirva me explica cómo son algunas personas, después se ríe.
*
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y los barcos
ResponderEliminary la pala
y la tierra
y el río
y los que flotan
amontonados en la orilla
***
lo sabes***
y nosotras en medio, como islas
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