letreros nuevos y relucientes





En estos días, todas las ciudades se parecen entre sí. 

Vistas desde el cielo, las casas son elementos de una gigantesca serie de planos arquitectónicos, con polvo debajo de las paredes y migajas de galletas podridas



Con mucha suerte, en alguna de esas casas, todavía se pueden encontrar cosas como:

Un camafeo con la foto de una desconocida
Una libreta anotada
Un lápiz
Ropa muy vieja y muy usada
Una muñeca sin/con ojos y los labios pintados de rosa pastel
Techo

***

Encontré en la calle uno de los letreros con los nombres antiguos de las calles, aquéllos que yo conocía. Me pregunté cómo se las habrían arreglado para volver a nombrar todo e incluso con otro alfabeto. La ciudad. Los barrios. Las calles. También las personas se llamaron de otra manera. 
Y eso que sólo estuve fuera cuatro años.

***

Todavía no sé si escribir gulag con minúscula o mayúscula

***

Reconocí la estación por un árbol. Un árbol gigante que se alza en el campo, pocos minutos antes de entrar en la ciudad, y que no se parece a ningún otro  en el mundo. Lo conozco porque fue ahí cuando, como barón rampante, hice el amor por primera vez, con Militsa, la chica que vivía al final de la calle. Sólo que ahora sus ramas son muñones fulminados por un rayo. Los letreros dicen Суботица en lugar de Szabadka. No comprendo las grafías cirílicas. 
De no ser por el árbol, tal vez hubiera bajado hasta Sofía.


***


En esos cuatro años aprendí a aborrecer todo lo relacionado con el nombre de mi ciudad. Siempre he criticado esa estúpida obsesión que obliga a la mayoría de la gente a regresar a la tierra que, por voluntad o circunstancia, un día abandonó. Cuando alguien se va no necesita maleta.

***

Si tuviera que escoger, me llevaría el camafeo. 

Ya que le cambiaron el nombre a la ciudad, que terminen de quemar el árbol.


*****


3 comentarios:

  1. la foto

    que por lo que recuerdo

    hablé del abandono de una casa

    que tambié fue una ciudad

    donde las vías de trenes

    estaban oxidadas

    y los niños

    ya no jugaban

    a adivinar nombres de caricaturas

    hacían mímica y permanecían

    en silencio por horas



    Te quiero***

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  2. ahhhh por cierto

    ya tienes 14 visitas!!!!!!!!!!!!!

    :D***

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